17 oct 2011

El sillín es mi dildo

Sillín Duo Power
Este verano, charlando con el diseñador de los sillines Duo Power sobre si realmente servían para algo o no, al final me dio uno para que lo probase. A mi no me convencen nada este tipo de sillines, pero tengo ya la costumbre de probar muchos sillines (creo que es lo que más a menudo cambio en mi bici), así que hace una semana me lo puse en la bicicleta. Me acabó convenciendo par aprobarlo porque me comentó sobre los problemas que tienen las mujeres ciclistas, que en muchos casos se tienen hasta que llegar a operar la zona de los labios por problemas de insensibilidad e inflamación ("vulva de la ciclista" se conoce comunmente). Y es que se escucha y habla mucho sobre la impotencia de los hombres con la bici, pero nada de las mujeres, como siempre. Se supone que, con este sillín, no se tienen esos problemas, ya que no tienen punta, y únicamente vas apoyadx en los isquiones (huesos del culo, para que nos comprendamos), quedando libre la zona perineal.
Mi dildo

Pero mi primer pensamiento nada más montarme fue que me faltaba algo entre las piernas. Era como si el sillín siempre hubiese sido mi dildo y no me hubiera dado cuenta antes. Se supone que hacen falta unos 7-10 días para adaptarse. Yo no lo he conseguido. Al final he vuelto a mi último sillín, que descubrí hará un año, con el que estoy muy feliz y que, además, es mi dildo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario